L'Arxiu de Sella

 Antonio Mora, el mestre.

Me llega de repente el enlace sobre este archivo de un pueblecito de la Marina Baja, Sella, de apenas 650 habitantes. L'Arxiu de Sella. Un espai per al patrimoni històric i cultural del poble. (http://larxiudesella.blogspot.com.es/). Y resulta que, con tan escasos habitantes e imagino que dados los "recortes", escaso pecunio, el pueblo tiene un Archivo, no sé si municipal, no he sido capaz de encontrarlo en la página de inico. Parece que funciona desde Octubre de 2011 y que el misterioso archivero se ha propuesto colgar una entrada al mes. Digo lo de "el misterioso" porque tampoco he encontrado información sobre él en la página.

(Sustituyo la foto que había antes por este cuadro que pintó mi padre en 1933. Naïf y todo, creo que completa la entrada de forma más personal)

Viene a cuento esta larga y necesaria introducción a propósito de la importancia de los archivos, aunque sean pequeños. Como bien saben los del Módulo, los archivos se nutren de documentos. Y en ellos se guarda parte de la memoria histórica y cultural de los pueblos y de las personas. Mi padre, Antonio Mora Paredes, fue maestro de la escuela unitaria entre 1926 y1944. Cuidadoso como era, fue redactando una especie de memoria de trabajo desde su llegada. En ella se nota su preocupación por los niños, su gusto por la pintura, que no lo abandonó nunca, la relación que mantenía con la gente del pueblo, con el paisaje que tantas veces recorrió y pintó. Y esos papeles quedaron guardados en casa, sin que él hiciera ostentación de ellos. Cuando llega el momento de ver lo que guardan las cajas, sus hijos descubrimos los detalles de la tarea pedagógica de nuestro padre.

 Tuvo la satisfacción de que las autoridades educativas reconocieran su tarea y le dieran su nombre a la nueva escuela del pueblo, junto con la de otro de los maestros que allí habían trabajado, Andrés Server. Toda su familia estuvo acompañándolo en aquel acto, que resultó para él de lo más emotivo por el encuentro con tantos de sus alumnos, más que por el agasajo que lo incomodaba. No guardo documento gráfico de aquello. Y lo lamento. Pensaba que, a pesar de la humilde tarea que desarrolló, mi padre había logrado pasar a la posteridad sin proponérselo. Muchos años después apareció por casa Moisés Aparici, persona que solía escribir para el diario Información de Alicante y que andaba embarcado en el proyecto de contar la historia de alguno de los colegios de la ciudad. Para ello necesitaba recabar toda la información textual y gráfica sobre los maestros que habían trabajado en ellos. APARICI, M. (2009): C.P. Benalúa, una historia que contar. Alacant: ECU editorial. Y nosotros le proporcionamos la relativa a nuestro padre.

Parece ser que, basándose en esos informes, el archivero de Sella ha redactado la entrada que aquí dejo, http://elcabilo.com/larxiu/2013/06/30/el-mestre-antonio-mora/, (http://elcabilo.com/radio/2013/07/02/larxiu-de-la-memoria-antonio-mora-la-revolucio-a-lescola/; con un audio muy emotivo) dedicada a rescatar del olvido la importante tarea que los maestros de pueblos perdidos desarrollaban en la época (mi madre ejerció en Guardamar  del Segura con 92 niñas durante los terrible años de la Guerra Civil). Sin todos los informes escritos por mi padre, sin su cuidadosa conservación, sin su estudio y utilización en obras de más aliento, toda esta memoria caería definitivamente en el olvido.

Quiero agradecer desde aquí la labor realizada con los textos y con la elaboración del material de audio, que me ha conmovido profundamente ante los testimonios de uno de sus alumnos, Pepito Pérez, el Llop. Mi padre, sus niños, el pueblo, siguen así vivos, quedando clara la importancia de los archivos grandes y chicos. Gràcies, de veritat.

José Manuel Mora.